EL FENÓMENO DE LAS TAPAS

La comida es uno de los placeres de la vida y la oportunidad de conocer diferentes culturas. España ha unido en su tradición culinaria muchas cocinas del mundo, mientras que cualquier plato, desde el más antiguo hasta el ultra moderno, es auténtico.

Nada “habla español” tan fuerte como las tapas, un “manjar humilde” tradicional que se sirve en todas partes: en bares, tabernas, chiringuitos y establecimientos con estrellas Michelin.

La tapa significa cubrir. El origen de la tradición no está claro; las leyendas se refieren a pastores, reyes, marineros borrachos y camareros ingeniosos, que cubren el vino con una loncha de jamón. Pero a España no le interesa demasiado la historia. Lo que sí importa es la calidad de los ingredientes locales que deben ser frescos. La confluencia de factores – suelo, clima y todo lo demás, que los franceses, siempre teniendo una hermosa palabra para todo, llaman el “concepto de terroir o terruño”, le da a los productos un sabor autentico. Andalucía es partidaria (sin saberlo) de la tendencia: del huerto a la mesa.

El “concepto de tapas” en España es descaradamente simple: al pedir una bebida, le traen cuencos de barro con los bocaditos de “lo que sea”. En otras partes del planeta, este “lo que sea” es comida gourmet. Reservando con antelación o haciendo cola, Usted puede entrar en un buen bar de tapas en Nueva York, Montevideo o Houston (donde, por cierto, el sabor de España es recreado por el chef Louis Roger, que trabajó en la cocina de gran Ferrán Adrià en El Bulli).

TAPAS PRESENTADAS EN AUTÉNTICOS PLATOS DE ARCILLA

La tapa española viene determinada por su lugar de nacimiento, pero no le es fiel. La tapa es cosmopolita, viaja mucho y se ha convertido en un fenómeno global. Lugares como Bistró Podenco (Luxemburgo), Tasca (Múnich), Boqueria (Estocolmo), el bar de tapas londinense Barrafina, galardonado con una estrella Michelin, le dan una idea de la verdadera Andalucía. Otros crean platos “inspirados en España” (tapas de estilo californiano) o combinan aromas y sabores locales y españoles, como el finlandés “Juuri” (suena más dramático si se pronuncia con acento español). El mundo ha caído bajo el hechizo de la tapa española.

¿Cuál es el secreto? La tapa es deliciosa, agrada la vista y mejora el estado de ánimo. Incluso la más simple – de pan tostado crujiente con tomate, aceite de oliva, ajo y sal marina – le hará suspirar y pedir una más. Modesta, que es lo que nos gusta de ella, pero con el huidizo factor X y los efectos secundarios espirituales, la tapa, como una especie de fenómeno cultural y social, necesita compañía. Se acompaña de conversaciones, flamenco, guitarra de fondo, bebidas, cuya elección es rica para los aficionados a tapas: fresquísima cerveza, vinos españoles – tintos ricos, Tempranillo joven y alegre, blancos refrescantes (líder de moda – Albariño), clásico jerez, sangría, adorada por los turistas. La cava se casa (término de un enólogo) con tapas fritas.

Un típico restaurante de tapas tiene un salón alargado con muebles originales que crean un ambiente inconfundible. De pie o sentado con una copa en la mano y cuencos de barro con tapas en la mesa es la forma perfecta de disfrutar de la vida. Visión del mundo, placer sensual, conocimiento filosófico de la sociedad y aventura al mismo tiempo. ¡Y Usted pensando que tan solo era la comida rápida de moda!

RICA ELECCIÓN DE TAPAS

La carta de tapas es como una maratón gastronómica y una felicidad culinaria infinitas: tortilla, jamón, patatas bravas, aceitunas y encurtidos, quesos, chorizo, pimientos fritos, setas con perejil, alitas de pollo picantes, croquetas, albóndigas en salsa (clásicos del género), anchoas fritas, sardinas (darán un recuerdo especial), lonchas de cerdo con cebolla caramelizada, gambas al pil-pil (con pan cateto para mojar hasta la última gota … la cintura puede arrepentirse, los receptores gustativos – ¡Nunca!). Y ¡Oiga! ¡Me trae una más!

Las tapas son buenas para la salud (los españoles nunca piensan en ello) pero a veces … son tentadoras. ¡La vida es demasiado bella para ser moderada! Las tapas dulces nos envían directamente al paraíso gourmet. Imagínese una ganache de chocolate con aceite de oliva y pétalos de sal andaluza Flor de Sal, nacida, según Pitágoras, “de los padres más puros: el Sol y el Mar”. ¡Bendecidme Dioses de la Salud, porque he pecado! ¡Pero qué hace uno cuando tantos milagros le aguardan en un solo lugar … o en varios…!

Las tradiciones se pueden honrar actualizándolas (con lo que los españoles pueden estar en desacuerdo) e introduciendo inesperados matices creativos en los clásicos. Esto es exactamente lo que hace el chef marbellí Dani García, galardonado con 3 estrellas Michelin, creando pequeñas obras maestras de tapas con los alimentos y mariscos locales.

Vivir en “Perlas del Mar” da facilidades para disfrutar de las tapas. Los chiringuitos del paseo marítimo, el nuevo Boulevard (tapas de estilo moderno), las tabernas con chic rústico del Casco Antiguo (paraíso para las personas tapa-dependientes) están al alcance de la mano. Incluso fuera de las rutas conocidas, tiene la garantía de encontrar lugares de tapas escondidos en las calles estrechas. ¡Buen provecho!

IR DE TAPAS Y DISFRUTAR!

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